De la orilla al pueblo

Salida desde el aparcamiento frente al estanque del Tour (Vieille-Eglise).

Desde el conjunto hidráulico creado en el siglo XVII hasta la simple riqueza ecológica, el Etang de la Tour ofrece más de una ventaja. Los paisajes, la fauna, la flora son notables. ¡Agregue a eso un desvío por el antiguo corazón del pueblo igualmente atractivo y habrá descubierto las trampas de Vieille-Eglise!

¡Diríjase al sur! Comience su caminata siguiendo el banco a la izquierda.

Construido en 1685 en el corazón del macizo suroeste del bosque de Rambouillet, el Etang de la Tour forma parte del complejo hidráulico de estanques y canales, entonces destinado a abastecer los juegos de agua y los jardines del Palacio de Versalles. Con una superficie de 17 hectáreas, es el más alto y el más aguas arriba de la red, es alimentado por el canal de Saint-Benoît.

Sus aguas fluyen hacia La Drouette en el sur, o hacia el estanque de Saint-Quentin-en-Yvelines en el norte, por el gran lecho de los ríos: una red de 34 km de canales, incluidos 23 km de acueductos subterráneos.

Volveremos a pasear por el estanque a la vuelta de este paseo. Bajo los árboles, espacios equipados con bancos y mesas te permitirán hacer un picnic a la sombra, a tu aire. Sin embargo, están prohibidos el canotaje, la natación y varias limpiezas. Y la pesca, como en cualquier espacio acuático público, está sujeta al cumplimiento de la normativa vigente ya la posesión de un permiso. Inmediatamente, el camino te lleva por la carretera hacia el bosque de Yveline.

Después del dique sur, gire a la derecha (flechas azules). A 150 m, tomar el camino de la izquierda por un línea eléctrica. Continúe recto durante unos 400 m, luego gire a la derecha en el cruce marcado como "21-26".

El camino, inicialmente ancho, está dominado por robles y luego por algunos abedules cuyos troncos blancos parecen florecer entre la maleza. Más adelante, fresnos de hojas simétricas acompañan tus pasos hasta salir del bosque; Les sucede un seto más bajo que delimita un campo. En el extremo izquierdo se encuentra la granja Clairbois, que se ha convertido en un centro ecuestre, que se puede ver entre los arbustos abiertos.

Una barrera baja cierra el final del camino. Pase por encima y diríjase a la derecha en la carretera que bordea la clínica.
A 400 m, plaza de l'Aqueduc donde encontraréis una pequeña fuente, tomar el camino de la izquierda, camino bajo el cual está construido el acueducto subterráneo que conecta las aguas del estanque de la Torre con el estanque de Perray.

A 650 m, se cruza el callejón sin salida de Clerambault, que se gira a la derecha (¡dependiendo de la hora, el sonido de las campanas también puede guiarlo!). Es desde este puente que el canal deja su subsuelo para fluir al aire libre en un amplio canal bordeado por caminos abiertos y árboles frondosos. El callejón sin salida conduce a la calle principal, que se toma a la derecha.

Aquí está al pie de la iglesia de Saint-Gilles, reconstruida en 1561 según una arquitectura bastante sencilla, con un ábside plano.
El campanario cuadrado está adosado al portal decorado con el escudo de armas esculpido de los abades de Clairefontaine. En la iglesia, vidrieras que datan de principios del siglo XX ilustran los rostros de sus donantes. Una magnífica copia del entierro de Tiziano, realizada en 1862 por JM Braille, había sido ofrecida por Napoleón III con motivo de la fiesta de la Asunción.

El Emperador concedía una vez al año a las parroquias que lo solicitaban, obras de arte (reproducciones religiosas) encargadas a jóvenes artistas.

Frente a la iglesia se levanta el ayuntamiento-escuela, construido en 1879 con las piedras de la antigua alquería que allí se ubicaba.
Todos estos edificios constituyen verdaderamente el centro del pueblo de Vieille-Eglise, que se extiende a lo largo de la calle principal, rue de l'étang de la Tour, que nos lleva de vuelta al lago. El antiguo hábitat de esta calle afirma la identidad rural del pueblo. Sin embargo, las fachadas regulares de los grandes edificios contrastan con las más modestas casonas vecinas.

La calle todavía ofrece algunas características interesantes antes de acercarse al estanque. Una cruz de madera, frente a la rue d'Auffargis, marcaba un lugar de parada durante las procesiones. La vieja bomba ubicada a pocos metros funciona pero ojo, su agua no es potable.

Apreciará aún un poco más una decoración exterior presente en algunas casas antiguas de la
Parque natural regional: la rocalla. Aparece aquí en una forma particular: en lugar de los habituales fragmentos de pedernal o piedra de molino, se han incrustado pequeños guijarros en el mortero de color rosa.

El páramo húmedo que bordea el estanque tiene una importante riqueza ecológica. Los pastos altos salpicados de plantas con flores y los cañaverales son el hogar de varias especies de aves de los pantanos. El intrépido somormujo lavanco puede incluso flotar a unos pocos metros de ti.

El escribano palustre se observará desde más lejos. Y la paciencia (posiblemente ayudada por unos prismáticos) te permitirá presenciar el majestuoso vuelo de las garzas reales, algunas de las cuales han elegido un pied-à-terre en la orilla opuesta.