Apasionada por el dibujo desde la infancia, Myriam Fantini garabatea todos sus escritorios y cuadernos escolares con pequeños personajes, principalmente mujeres y niños de su imaginación. Restringe su paleta a tres o cuatro tonos.
Desde pequeña, sus aptitudes para el dibujo, su creatividad y su pasión por la moda y la decoración sin duda predestinaron a Myriam FANTINI a un futuro profesional en estos mundos, pero su vida tomó otro rumbo, particularmente en el campo del turismo y el aire.
Años más tarde, volverá a sus primeras aspiraciones, y desviará las habilidades técnicas de una formación de pintora-decoradora en beneficio de la creación de obras más personales. Durante cinco años, "llevada" por sus numerosos viajes y especialmente por el curso de adopción de sus hijos en Polinesia y Nepal, alimenta su obra fundamentalmente con los rostros y ojos de niños del otro lado del mundo (logros en óleo sobre madera recubierta)
Hoy, madre satisfecha, se escapa una vez más al mundo de la moda y se inspira en los años 50. Materias primas e inacabadas, como el papel y el yeso.
Siempre en busca de nuevas experiencias artísticas, a veces interrumpe su trabajo con la creación de lienzos a “cuatro manos” con un amigo pintor (alaryfrancine.com). El tiempo del encuentro de dos universos diferentes: el abstracto y el figurativo
Más información: https://myriam-fantini.webnode.fr/
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